miércoles, 30 de abril de 2014

Guardián de las profundidades

Hoy no os traigo una nueva crónico; hoy traigo algo mío que me apetece compartir con todos los que os pasáis por aquí.
Quizás algunos conozcan mi pasión por la lectura; quizás otros no. No es algo reciente, sino que empezó cuando era una niña que apenas sabía escribir una frase compleja. Comencé con pequeños cuentos infantiles y desde entonces no he dejado de escribir.
Todo lo que he creado siempre lo he guardado para mí, sin la menor intención de que viese la luz algún día, pero todo eso cambió hace poco más de un mes.
Hoy os traigo mi primera presentación a un concurso de literatura, en concreto, de microrelatos cuya temática es el mar. He querido compartir con vosotros mi pequeño relato y no dejarlo en un cajón guardado bajo llave, al que nadie pueda acceder.
Espero que os guste.

GUARDIÁN DE LAS PROFUNDIDADES

Tenue luz que discurre bajo la calma; leves corrientes que circulan en la inmensidad; materia que sirve de alimento a la biota. Mundo que escapa a la vista de muchos y al oído de otros tantos, que sirve de aprovechamiento a la humanidad siendo un gran desconocido.
Omar, ajeno a todo ello, se deja envolver por el rumor de las olas al romper, por el olor a salitre que llega hasta su pituitaria, por ese color azulado que lo llena de paz.
Ante la inmensidad que su temprana edad no puede abarcar, el pequeño de tez morena sueña con ser algún día su guardián, el que proteja el más bello tesoro que en sus escasos diez años ha visto. El mar.

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